Buenas tardes alumnos:
En este artículo les comparto las indicaciones para realizar nuestra actividad de lectura, la cual consiste en lo siguiente:
1. Vamos a leer el texto que les comparto en el artículo, el cual es un fragmento de la obra de teatro titulada "El príncipe que todo lo aprendió en los libros" del autor Jacinto Benavente, esto con la finalidad de recordar los elementos del guion teatral que revisamos anteriormente en clase.
2. Una vez que terminé mi lectura, realizaré lo siguiente en la libreta de Español:
a) Escribir de qué trató el texto que leí.
b) Escribir una parte del texto que ejemplifique los siguientes conceptos que revisamos en clase: LUGAR DONDE OCURRE LA OBRA, ACOTACIÓN, DIÁLOGO, QUIÉNES SON LOS PERSONAJES.
"El príncipe que todo lo aprendió en los libros"
ACTO SEGUNDO
CUADRO PRIMERO
LA CASA DEL OGRO.
ESCENA PRIMERA
EL OGRO, Y DESPUÉS LA BELLA Y TONINO.
EL OGRO: ¡Hola! ¿Qué es esto? ¿No hay nadie aquí? ¿No se come en esta casa?
¡Pécoras mujeres!
LA BELLA: No grites. Ya estoy aquí.
EL OGRO:¿Qué huésped es ése?
TONINO: Servidor humilde. (Aparte). Sí que no me da buena espina esa panza
enorme. Ogro tenemos.
LA BELLA: Es un viajero que estaba perdido a la entrada del bosque del Infierno. Le
acompañaban otros dos señores, locos de remate, que allí se quedaron. Éste
me dijo que estaba muerto de hambre y de cansancio, y le ofrecí nuestra casa.
EL OGRO: ¡Hum! No me gusta esa gente que anda perdida por los caminos. Por las
trazas, sois uno de esos truhanes chocarreros que cantan y danzan por los
lugares para sacar los cuartos a los bobalicones.
TONINO: Soy algo más. Soy criado del Príncipe Azul.
EL OGRO: Su bufón, diréis. Bajo estado…
LA BELLA: ¿Y era el Príncipe el que os acompañaba? ¿Aquel jovencillo desventurado
que echó por el bosque? ¡Pobrecillo! ¿Qué habrá sido de él?
TONINO: Habrá encontrado el hada buena.
LA BELLA: Sí, sí. Con algunos malhechores. ¡Pobrecillo!
EL OGRO: Bueno, bueno. Sírveme la comida, y ese bergante que vaya a la caballeriza,
y allí le darás de las sobras…
LA BELLA: No seas tan ruin… Coma y beba a sus anchas; nos divertirá con canciones
y chistes…
EL OGRO: Nunca me divirtieron esas cosas. Pero acomodaos donde queráis y esperad
a que hayamos comido. Sirve pronto.
TONINO: (Aparte). ¡Ay! ¡Qué suplicio! ¡Ver comer y no probar bocado! Preferiría
que al Ogro le diera por engordarme… ¿Si le habré parecido poco
apetitoso…? ¡Señor! ¿No habéis reparado en mí…? Mi carne es de la mejor
calidad… La pechuga es sabrosa, y mis brazos son como alones de pichón.
EL OGRO: ¿Qué me importa? ¿Estáis loco o borracho?
TONINO: (Aparte). Nada; no hace aprecio de mí… Le gustarán sólo los niños
tiernecitos… Verdad es que teniendo a mano tan bien provista mesa… ¡Ah!
¡Qué aroma! Ese cochinillo me pierde.
EL OGRO: Huele bien, ¿verdad? Os dejaré algún hueso.
LA BELLA: (Aparte). ¡Pobrecillo! Le daré algo a escondidas.
TONINO: (Aparte). Gracias, bella señora. Me dais la vida. ¡Ah! ¡Delicioso!
EL OGRO:Bueno. ¿Es ésa toda vuestra gracia? Decidme algo chistoso.
TONINO: ¡Ah!
EL OGRO: ¿Qué os sucede?
TONINO: Nada, nada.
EL OGRO: ¿Estáis tragando?
TONINO: No, no… Eran ilusiones. (Bajo, a la Bella): Un traguito, por piedad, que
me ahogo.
LA BELLA: No seáis cruel. Dejadle, por lo menos, que beba.
EL OGRO: Eso sí… Que beba.
LA BELLA: Tomad.
TONINO: A la salud de tan noble señor. ¡Ah…! ¡Bueno es el vinillo!
EL OGRO: De mi cosecha.
TONINO: Ya se ve que sois hombre rico.
EL OGRO: Asómate a esas ventanas. Tu vista alcanzará hasta un monte lejano; pues
hasta allí, todo es mío. Detrás de ese monte hay muchas más tierras…, hasta
llegar a un río; pues hasta allí, todas son mías. Detrás del río hay otras tantas
tierras que llegan hasta el mar; pues hasta el mar, todo es mío.
TONINO: ¿Pero el mar no? ¡Qué lástima!
EL OGRO: El mar no me serviría para nada. El mar es para los locos y los navegantes,
gente aventurera… Yo soy un hombre práctico…
TONINO: Ya se ve que sí.
EL OGRO: Vivo aquí más feliz que un rey.
TONINO: Es posible… Nunca vi comer a un rey con tan buen apetito…
EL OGRO: Pues esto no es nada más que la merienda… Esta mañana me almorcé una
ternera asada… Y para cenar… ¡Ah! Para cenar guardo mi mejor bocado.
TONINO: (Aparte.) ¡Huy! Ahora me mira. Se le habrá antojado guardarme para la
cena. Si vierais que con el cansancio del viaje estoy tan poco presentable…
LA BELLA: Ya os aviaremos.
TONINO: (Aparte). ¡Huy! Van a ponerme en salsa… Ésta será mi cocinera… ¿Habéis
terminado?
Esta tarea se revisará el día MARTES 22 DE MARZO EN CLASE.
Cualquier duda o comentario, estoy para servirles. Saludos a todos y excelente tarde.